Los pasos para ejecutar correctamente el hormigón impreso
Cuando se está decorando un hogar, uno de los aspectos en los cuales suele pensarse es en el piso. El hormigón impreso es una buena opción, que si bien tiene varias décadas empleándose en las casas a nivel mundial, vuelve a estar de moda por sus novedosas texturas, colores llamativos e incluso diseños. Implementar pisos de hormigón impreso es sinónimo de una buena inversión, ya que se destacan por su durabilidad, resistencia y aspecto llamativo.
Como el hormigón es esencialmente cemento mezclado con arena, gravilla, grava y otros elementos similares, goza de fama al ser una composición resistente, de fácil mantenimiento, económica y por ello es muy empleada en las construcciones, de hecho es lo que se emplea para el concreto de las calles y sus aceras. Sin embargo se diferencia del hormigón impreso porque este tipo de hormigón es sometido a procedimientos físicos o tecnológicos para darle una apariencia estéticamente llamativa con tonalidades, diseños grabados y texturas.
Además de su apariencia llamativa y la variedad de diseños, el hormigón impreso es excelente para espacios abiertos, pues su material es resistente a los rayos UV, no se ve afectado por los cambios de temperatura, es antideslizante, impermeable, no se mancha ni por grasa ni químicos y tolera bastante bien los cambios de temperatura, por lo cual no presentará ningún problema bajo ninguna estación.
El hormigón es muy recomendable para zonas de alto tráfico como patios, rampas, jardines, piscinas y parques. Lo mejor de todo es que casi no requiere mantenimiento aunque entre en contacto con aceites y ácidos, por ello resultan una buena alternativa si usted no quiere usar el pavimento gris, tradicional y sin gracia en casa.
¿Cómo se trabaja el hormigón?
El procedimiento no es complicado, perfectamente lo puede instalar usted mismo si tiene habilidad para este tipo de tareas, pero si quiere obtener mejores resultados, existen empresas que se encargan tanto de vender el hormigón impreso como de instalarlo.
Tenga en cuenta que por metro cuadrado, debe verter aproximadamente 1 kilo de hormigón impreso. Cuando usted compra el hormigón impreso, tendrá un polvo que deberán mezclar con agua hasta obtener una mezcla homogénea y espesa. Existen tres formas de descarga el hormigón: Por medio de una bomba, un dumper o directamente.
Es de suma importancia que el suelo base esté en óptimas condiciones, de hecho lo puede reforzar con una malla de acero, que deberá instalar previamente a cubrir el área con la mezcla, de este modo obtiene una base los suficientemente fuerte.
El secreto para un mejor acabado, es que luego de esta fase se extienda el material por todo el área a trabajar de forma lineal y nivelada, de modo tal que la superficie quede completamente lisa. Para esta tarea puede emplear regletas, pértigas, moldes y palas alisadoras. Un dato interesante es que si la superficie donde instalará su hormigón impreso es muy amplia, puede dividirla áreas más pequeñas y trabajarlas una por una. Crear esta superficie en indispensable pues aporta resistencia a hormigón impreso, además le otorga una coloración uniforme. La precaución está en que el material en polvo para dar la coloración deseada, sea compatible con la cal que conforma el hormigón, a fin que no se descomponga ni se cuartee en el momento que el cemento se está endureciendo (fraguado).
Estando el hormigón fresco, y con la superficie totalmente plana, se rocían tintes y desencofrantes, que no son más que químicos no tóxicos que protegen las áreas, preservando así la vida útil del material y los signos de desgates son minimizados. A la vez, constituye un producto antiadherente para que el hormigón impreso no se pegue al armazón metálico o de madera, que delimita el área donde será fijado.
Cuando ha secado, o en todo caso se ha absorbido el desencofrante, se comienza el grabado o diseño empleando un molde de neopreno, a fin que quede el mejor acabado posible en cuanto a texturas, formas, piezas, piedras, adoquines, pizarras y baldosas.
Posteriormente se lava con agua a presión, se aplica resina con base en agua y después con resina protectora. Se estima que esta acción la puede realizar 24 horas después, entre las cuales ha secado lo suficientemente bien la mezcla. Esta operación es básica en todo el proceso pues permite quitar los residuos, puede ayudarse con agua y un cepillo.
El toque final lo pone 24 horas luego de hacer el lavado, ahora sellará la apariencia del hormigón con una capa de endurecedor, bien sea puro o con un toque de color. Esta resina es un producto que suele adquirirse en polvo, por lo cual deberá disolverlo y aplicarlo en toda la superficie con un rodillo, esto le dará brillo e intensificará las tonalidades elegidas.
El hormigón impreso es común verlo no solo en casas, también en plazas, parques, caminerías, urbanismos, en fin, sus posibilidades de uso de numerosas pero siempre son una muy buena opción práctica, elegante y duradera.